[María Martínez. CinemaNet]
La historia, la fe y la familia, protagonistas de la XV edición de los Premios Alfa y Omega al mejor cine del año.
Una edición en la que la polaca Katyn ha sido la gran triunfadora, llevándose cuatro galardones: Mejor Película Extranjera, Mejor Director para el veterano director polaco Andrej Wajda), Mejor Película Histórica y Mejor Película sobre el Hecho Cristiano. El director Andrej Wajda, cuyo mismo padre murió a manos de los soviéticos, junto a otros 20.000 polacos, en los bosques de Katyn, consigue huir de la manipulación que se ha hecho durante décadas de la masacre -atribuida a los nazis-, y no hace «la más mínima concesión al efectismo ni a la demagogia maniquea». Además, introduce sin estridencias en la narración un «catolicismo sólido y arraigado en el sufrimiento».
A pesar de su dureza, Katyn es «un monumento a la verdad histórica y a la verdad del hombre, que conmueve por su historia y sus valores estéticos», explicó en la presentación de los premios el portavoz del Jurado, el crítico de cine Juan Orellana. Asimismo, afirmó que «en el cine sigue habiendo cada año motivos de esperanza; películas que muestran la vida de una forma que nos conforta y nos hace alegrarnos de ser humanos».
La siguiente película más premiada, Amazing Grace, de Michael Apted, comparte con Katyn aspectos como su carácter histórico y la importancia que tiene la fe para sus protagonistas. Sin embargo, los premios recibidos no dejan de tener menor rango: Mejor Actriz de Reparto para Romola Garai, que interpreta a la novia y luego esposa del protagonista, William Wilberforce; y Mejor Banda Sonora para la «vigorosa y emotiva» partitura de David Arnold.
En esta edición de los Premios Alfa y Omega, se ha retomado la tradición de ediciones anteriores de otorgar dos premios a la Mejor Película, según su nacionalidad. Esta costumbre se había abandonado el año pasado, en la que la galardonada como Mejor Película fue Juno. Junto a Katyn como Mejor Película Extranjera, se encuentra esta vez La vergüenza, de David Planell, como Mejor Película Española. La cinta narra las dificultades de una pareja a la hora de tratar a su hijo de acogida, un chico problemático que ha sido devuelto por varias familias.
El semanario Alfa y Omega tiene la costumbre de entregar, además, premios temáticos. Además de los dos recibidos por Katyn, Up (Pete Docter y Bob Peterson), la cinta animada que narra las aventuras en Sudamérica de un anciano y un joven «boy scout», ha sido considerada la Mejor Película Familiar. Asimismo, Still Walking, de Hirokazu Kore-eda ha sido reconocida como Mejor Película sobre la Familia.
El galardón al Mejor Guión ha sido para la historia de un violonchelista que se ve obligado a trabajar en una empresa funeraria de un pequeño pueblo, narrada con delicadeza por Kundo Koyama en Despedidas (Yojiro Takita). En cuanto a las categorías técnicas, Anthony Dod Mantle ha obtenido el Premio a la Mejor Fotografía por su trabajo en Slumdog Millionaire (Danny Boyle).
Entre los premios interpretativos, además de Romola Garai, han sido premiados Clint Eastwood como Mejor Actor Principal por Gran Torino, su despedida de la interpretación; Melissa Leo (Frozen River) como Mejor Actriz Principal; y, por su interpretación en El desafío. Frost contra Nixon, Frank Langella como Mejor Actor de Reparto.
El anuncio de los premios estuvo presidido por monseñor César Franco, obispo auxiliar de Madrid, quien, citando a Benedicto XVI, dijo que «la verdadera belleza provoca en el hombre una saludable sacudida que le hace salir de sí mismo». También habló de la necesidad de que, ante el cine, «los ojos sean capaces de descubrir no sólo la técnica, sino el espíritu que va más allá de las cosas». Es lo que hace -añadió- Alfa y Omega, que «ve la totalidad de lo creado desde una perspectiva novedosa, que es Cristo, la verdad definitiva». También intervino el director del semanario, quien explicó que se ha querido premiar a películas que reflejen la realidad. A continuación, subrayó que, entre las películas candidatas a los premios este año, había muchas que hablaban sobre la familia. «En este momento de crisis -añadió- son un motivo de esperanza y ya de por sí merecen un premio».
Monseñor César Franco ha sido una vez más el presidente del Jurado, que estuvo compuesto por el escritor Juan Manuel de Prada; los críticos de cine Juan Orellana y Teresa Ekobo; los periodistas y profesores universitarios Ninfa Watt (colaboradora, además, de CinemaNet) y Álvaro Abellán; y Juan Manuel Blanch, Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad CEU-San Pablo. Participaron en las deliberaciones, como en ediciones anteriores, el Delegado episcopal, Alfonso Simón, y el director del semanario.