Si, ese ogro verde, grosero, antipático pero con un corazoncito escondido bajo un quintal de malos modales, me parece una lección magistral sobre aquel "las apariencias engañan" tantas veces llevado al cine.
La historia, un cuento en el que nada es lo que parece o lo que "políticamente correcto" debería ser en un cuento infantil, nos va descubriendo que todos los personajes tienen posibilidad de alcanzar su sueño (el Asno pelmazo, un amigo; Shrek, un amor; la princesa, vivir sin esconderse) aunque mantiene el principio clásico de que "el bien siempre vence al mal" y lo de que "vivieron felices para siempre", de aquella manera
