http://www.youtube.com/watch?v=KXjXo2eI ... re=related
Quería buscar un fragmento de la película en la que el joven Huw, protagonista de la obra, recibe lecciones de vida de un reverendo. Lo he buscado en youtube pero no lo he encontrado.
Sin embargo, he hallado el principio, los nueve primeros minutos, de esta imperecedera película de John Ford, en VO, como debe ser, y subtitulada, como procede aquí.
No he podido por menos que emocionarme, como siempre, al verla, y he querido compartirla. Amén de la belleza plástica de las imágenes (el trabajo con la luz es impresionante), vemos que Ford precisa no más de 20 segundos para activar los resortes de la nostalgia, 20 segundos más para dejar clara la importancia de la figura paterna -y la de los hermanos- en el seno familiar, la joie de vivre de una familia humilde en el seno de una comunidad humilde, en un valle minero de Gales.
Bastan pocas imágenes, y aún menos palabras, para entender por qué John Ford es uno de los mayores maestros del Séptimo Arte. Porque es genuíno. Porque quiere decir cosas importantes y sabe cómo decirlas. Porque sus valores son universales. Porque es emocionante.
Creo que es importantísimo que las nuevas generaciones de espectadores no dejen atrás el Cine Clásico. Los autores de las primeras generaciones, como Ford, como Dreyer, como Ozu, como Chaplin, como Walsh, como tantos otros, bebieron de una única fuente, la propia vida, para construir las imágenes de los filmes. Las generaciones posteriores -como Eastwood, como Spielberg, como Scorsese, como tantos otros- beben de otra fuente, el propio cine, con el que crecieron. Esa diferencia es importante. No digo que sean mejores unos que otros, porque no deben compararse en tanto que hijos de distintas épocas. Pero sí creo que no se debe visitar el presente sin conocer el pasado. Y lo maravilloso del Cine es que se trata de una manifestación artística tan joven que es posible acercarse a sus raíces.
En todo caso, lo que sigue pasmándome del Cine Clásico es que sus valores son mucho más diáfanos que los que buscamos en el Cine Contemporáneo. Lo que no significa que los discursos de esas películas sean ingenuos ni trasnochados. A menudo son muy complejos, como atestigua la película que aquí se presenta o, sin ir más lejos, el entero corpus de la filmografía de John Ford.
"It is with me now, so many years later. And it makes me think of so much that is good, that is gone."
