Una película que comercialmente no fue un éxito pero la historia que cuenta es para estar entre las diez mejores películas del 2024. La historia del doctor Ming Wang, el cirujano ocular más influyente del mundo. Este reputado oftalmólogo se enfrenta a la misión imposible de salvar la vista de un huérfano ciego. Es la historia real de un niño prodigio que huye de la China comunista y se convierte cirujano pionero en Estados Unidos. De los tres mil elegidos de su país para ir a las Américas, solo quedaron tres y era muy difícil entrar en la carrera de Medicina y más siendo chino, pero en las notas batió el récord de 95 aciertos sobre 100.
Cuando recibe el encargo de intentar devolver la vista a una niña huérfana, revive los traumáticos recuerdos de su juventud durante el violento periodo de la revolución cultural y enfrentarse con el pasado será la clave para abordar el presente. Y como dijo una camarera que lo conoció: “con el pasado construimos el presente”; y lo invitó a tomar una copa después de su trabajo con la cortesía de ser también su terapeuta y ahorrarse dos horas de consulta, palabras maravillosas de esta mujer.
Creó la Fundación Wang para la restauración de la vista, una organización sin ánimo de lucro, que ha ayudado a pacientes de más de 40 Estados de USA y de 55 países de todo el mundo, con cirugías realizadas gratuitamente. En la actualidad, miles de oftalmólogos de casi todos los países del mundo utilizan lentes de contacto de membrana amniótica y millones han recuperado la vista.
Una frase muy bonita de la película es de santa Teresa de Calcuta: “que el verdadero amor es el que nos vacía de nosotros mismos”. Dice el protagonista: «Yo recé pidiendo un milagro para la curación de la niña y que pudiera ver, le rogué al Señor y mire lo que hace Dios cuando nos negamos a creer que todo tiene un propósito, ella es el milagro.»
Es una película con muchos mensajes de fe y de esfuerzo, de un niño que quería ser médico y para conseguirlo su familia se sacrificó para conseguir un billete de avión y fregó platos en los restaurantes para poder pagar los 1500 dólares de matrícula. Hay que destacar el gran amor que le tenía a su familia. Fue un genio, pero lo mejor de él era su bondad y su amor a la investigación.
Película que deberían ver todos los médicos, entró en la lista de las 50 mejores del 2024 y entre las 6000 mejores de la historia y me recuerda mucho a otras de las mejores películas de medicina de casos reales, la polaca Dioses (2014) que cuenta la historia del cirujano Zbigniew Religa, quien hizo el primer trasplante de corazón exitoso en Polonia en los años 80 en contra de la opinión de sus colegas y luchando por sacar adelante su propia clínica. Religa, al atreverse a trasplantar un corazón humano, rompió barreras morales, culturales y religiosas. Película que está en Amazon Prime. Puntuación 8 sobre 10.