![]() |
ESTRENO RECOMENDADA POR CINEMANET Título Original: I don’t know how she does it
|
SINOPSIS
En Tentación en Manhattan conoceremos a Kate Reddy, una mujer que por el día se deja la piel en una firma bostoniana de gestión financiera, y que, al caer la noche, vuelve a casa para reencontrarse con su amantísimo esposo Richard, un arquitecto que acaba de perder su trabajo, y sus dos pequeños hijos. Este precario equilibrio entre trabajo y familia es el mismo que mantiene a diario la mordaz Allison, la mejor amiga y compañera de trabajo de Kate, y que trata de evitar a toda costa la joven Momo, la competente subalterna de Kate con fobia a los niños. Cuando Kate recibe un importante encargo que la obliga a realizar frecuentes viajes a Nueva York, Richard consigue a su vez el trabajo de sus sueños, situación que debilita el delgado hilo que mantiene unido al matrimonio. Para complicar las cosas, el nuevo y encantador colega de Kate, Jack Abelhammer, acaba resultando una inesperada tentación para ella..
¡Debate esta película en nuestros foros!
CRÍTICAS
[María Luengo – Pantalla90]
La ejecutiva agresiva se llama Kate Reddy, y es también esposa y madre de dos hijos. Su ascenso profesional le exige cada vez más dedicación. Es una de esas heroínas que abundan hoy en día, que intentan compaginar su exigente trabajo con el cuidado de su familia, y ambos roles a un nivel de competitividad enorme.
El resultado, una mujer con mucho estrés y dos vidas intensas, pero sin tiempo ni tranquilidad para disfrutar ninguna de ellas. Son mujeres esclavas del móvil y el correo electrónico, con cierto complejo de culpa por no dedicar más tiempo a sus hijos. Magníficas profesionales que adoran su trabajo, pero claro, su vida personal se resiente.
El título y el cartel en español son engañosos, quieren evocar a la protagonista de Sexo en Nueva York como reclamo comercial. Pero no es la historia de una tentación, sino de lo difícil que resulta la conciliación para una mujer. Además la protagonista es de Boston, aunque viaja a Nueva York a menudo, y no nos deleita con sus increíbles vestidos y zapatos manolos como Carrie Bradshaw. Una traducción más fiel sería “A saber cómo lo hace”.
Cinematográficamente no aporta demasiado, más allá de un guión ágil y una historia divertida sobre el frenético ritmo de trabajo norteamericano, como ya hizo con el mismo guionista en El diablo se viste de Prada.
La historia es muy realista, con situaciones demasiado familiares, donde los proyectos profesionales dan mucha satisfacción pero chocan con el tiempo que nos quitan para la pareja y los hijos, y más aún en el caso de las mujeres.
El realismo de la mujer multitarea contrasta con la visión casi caricaturesca de la mujer que se dedica a su familia por completo. Este modelo sale bastante mal parado, se pasa toda la mañana en el gimnasio, sin más preocupación en la vida que hacerse la manicura, cocinar tartas y criticar a los demás. También quedan en mal lugar el otro extremo de mujer autómata, súper eficaz en el trabajo pero con un claro rechazo a la familia y la maternidad. Los hijos se ven como una dificultad para la trayectoria profesional y un incordio en lo personal. La cuarta parte de las mujeres norteamericanas afirma que no quiere tener hijos. Escalofriante.
El mensaje de la película es claro, divertido y nada ñoño: la conciliación es difícil pero no imposible y cuando hay que priorizar, la familia es lo primero.
[decine21]
LA MADRE «MALABARISTA»
Tras la discreta acogida por parte del público de la excelente Historia de un crimen, sobre la relación de Truman Capote con los asesinos que le inspiraron para escribir A sangre fría, Douglas McGrath cambia por completo de registro, y dirige una comedia romántica sin muchas pretensiones. Parte de un guión de Aline Brosh McKenna, que basándose en su propia experiencia personal escribió El diablo viste de Prada. En esta ocasión, McKenna adapta el libro de Allison Pearson que se editó en España como La vida frenética de Kate.
Casada y con dos hijos y también prolífica guionista, y aunque parte de un libro ajeno, se intuye que McKenna ha puesto también en esta ocasión mucho de sí misma en el libreto. Kate Reddy, ejecutiva de éxito de una importante empresa de gestión financiera, se ve obligada a hacer auténticos malabarismos para atender a su marido, arquitecto, y a sus hijos, a los que casi no puede ver por sus constantes viajes. Su situación se vuelve más complicada cuando tiene que ocuparse de un nuevo proyecto profesional junto con Jack Abelhammer, un tipo tan refinado como atractivo. Como pasa mucho tiempo con Jack, entre ellos surge cierta atracción, por mucho que Kate ni se plantea la infidelidad…
Se puede argumentar en contra de esta cinta que todo es convencional, y excesivamente rutinario y previsible, y que el conflicto apenas despierta tensión dramática. Además, los personajes son claros clichés, y todo parece montado como vehículo de lucimiento facilón en torno a Sarah Jessica Parker, que viene a interpretar a una prolongación de su Carrie Bradshaw de Sexo en Nueva York con la variante de que se ha convertido en madre.
McGrath, cuyo mayor logro es que ha sido uno de los pocos guionistas con los que ha colaborado Woody Allen, en concreto en Balas sobre Broadway, aspira también a retratar a neoyorquinos típicos con una puesta en escena que quiere recordar lejanamente a la de las películas del genial realizador y actor. No llega ni mucho menos a la altura, pero aunque se aparta del cine de su modelo en el tono, se agradece que sea extremadamente positivo en sus reflexiones sobre la conciliación entre trabajo y vida laboral.
El film es poca cosa, pero contiene un sentido alegato a favor de la maternidad. Además, Sarah Jessica Parker es un actriz solvente, con gracia para la comedia y está rodeada de actores eficaces, como Pierce Brosnan (Abelhammer), Greg Kinear (el marido), la actriz de Mad Men Christina Hendricks (compañera de trabajo y amiga) y el inolvidable actor de Cheers y Frasier, Kelsey Grammer (el gran jefazo)..
¡Debate esta película en nuestros foros!