Sinopsis
Ante el ineludible y complicado mandato de Omar Navarro, cabeza del mayor cártel de México, a Marty y Wendy Byrde de negociar con el FBI un trato favorable para él y su familia, el matrimonio tendrá que compaginar una tarea sin precedentes en la historia con las tensiones con su hijo Jonah y fricciones territoriales con Darlene Snell, además de aplacar el ímpetu arrollador de Ruth y mantener una prudencia máxima ante la llegada del sobrino del narcotraficante, un personaje nervioso y de gatillo fácil.
Crítica
Si hay algo en lo que no han escatimado esfuerzos los productores de Ozark es en haber invertido tiempo y recursos económicos en el desarrollo de la historia. A lo largo de las temporadas se ha observado que un resultado tan cuidado no es casualidad, sino que el producto se ha ido cocinando lentamente. Quien haya prestado atención a la serie se habrá dado cuenta hace tiempo de que el narcotráfico, la política y el Gobierno son temas menos trascendentales que sirven como un contexto propicio para llevar a los personajes a complejas situaciones límite. El verdadero fundamento de la obra de Bill Dubuque es el fondo de los personajes, sus interrelaciones y las consecuencias que sus decisiones pesan sobre su futuro propio, la familia, su carácter y el mismo alma.
Es cierto que la obra está construida de manera colosal, y que la narrativa va cogiendo cada vez más altura. A la vista está que la interpretación del elenco es magnífica (especial atención a una espléndida Laura Linney), y que el arco de los personajes derrocha una evolución dramática exquisita. Sin embargo, lo realmente poderoso de Ozark, su gran acierto por así decirlo, es que en todo momento permanece una constante esencial: la realidad siempre se impone. Este es el mensaje. El director no intenta hacer piruetas con un imaginario que evada al espectador de una pedagogía lógica. Esta ecuación nunca falla, es invariable. Toda acción de los protagonistas tiene un impacto natural, tanto para el bien como para el mal. Y en esta última esfera es donde la serie resulta magistral.
Bajo la premisa de que el dinero y el poder arrastran grandes masas y parece que configure el mundo, constantemente se muestran las conclusiones connaturales a codicia, violencia, mentira, corrupción, perversión y demás pecados instalados en las figuras más importantes de la trama principal. Cuando este pilar se ha consolidado, todo lo demás se refleja con mucho más sentido común y por tanto credibilidad. Las subtramas están bien hiladas, todos los detalles, por ínfimos que parezcan a primera vista, gozan de un peso altísimo para el logro del objetivo mencionado. Los silencios, las miradas, las palabras no dichas a tiempo, mentiras en principio insignificantes e incluso decisiones menores justificadas aunque malas.
Ozark siempre se mueve alrededor de estos puntos. Por eso el tono empleado no permuta de su oscuridad y aspereza características. Son ambos acentos genuinos a lo que se refleja en la serie, No puede ser de otra manera. Han de impregnar el lenguaje visual de los personajes y las escenas, deben acrecentar en el televidente la alerta sobre un tema tan trascendental como es el divorcio surgido en la tridimensionalidad de los protagonistas. Estos mismos están rotos por haber justificado los medios en tantas ocasiones. Esta es la lucha que el director quiere se vea claramente en ellos: supervivencia contra moral. Un combate que en mayor o menor medida se da en cada ser humano todos los días de su vida. Son decisiones, es la libertad para hacer el bien.
Ficha técnica

- Título Original: Ozark
- Dirección: Bill Dubuque
- Guión: Bill Dubuque
- País: Estados Unidos
- Año: 2021
- Duración: 60 min.
- Género: Thriller, crimen, drogas, familia
- Interpretación: Jason Bateman, Laura Linney, Julia Garner, Sofia Hublitz, Skylar Gaertner, Peter Mullan, Janet McTeer, Jason Butler Harner, Anthony Collins, Esai Morales, Harris Yulin, Felix Solis, Carson Holmes
- Productora: Netflix
- Música: Danny Bensi, Saunder Jurriaans
- Fotografía: Ben Kutchins
- Estreno en España: 2021