Sinopsis
La aventurera duendecilla Elfkin, Elfie, sueña con una vida más emocionante, donde pueda combinar su típica ayuda secreta de los Elfkins con diversión y adrenalina. Para disgusto de los miembros más mayores de su clan, que quieren que todo siga igual. Pero cuando Elfie conoce a Bo un día, su vida da un giro inesperado. Bo pertenece a un clan Elfkin cuya filosofía gira en torno a la diversión y el uso de gadgets de alta tecnología para hacer cosas atrevidas y no necesariamente legales, razón por la cual la obsesiva agente de policía Lanski y su intrépida gata policía Polipette los persiguen. ¿Podrá la amistad entre Elfie y Bo reconciliar a los dos clanes Elfkin tras más de 250 años y hacer realidad el sueño de Elfie de vivir como una “Súper Elfkin”?
Crítica
Los Súper Elfkins | Sencilla película animada con buenos mensajes
En 2019 se estrenó Los Elfkins, una humilde producción animada llegada desde Alemania dirigida por Ute von Münchow-Pohl con guion de Jan Strathmann inspirada en las leyendas populares de la ciudad de Colonia acerca de los Heinzelmännchen, también conocidos como los Elfkins, duendecillos que por las noches ayudan a los humanos a sacar adelante sus tareas sin que éstos lo adviertan. Ahora en 2025 llega la secuela, Los Súper Elfkins, dirigida el mismo director y con el mismo guionista, quienes se muestran inspirados para llevar la historia por nuevas sendas y volver a hacer un filme apto para todos los públicos aunque especialmente pensado para los más pequeños.
La aventurera duendecilla Elfkin, Elfie, sueña con una vida más emocionante, donde pueda combinar su típica ayuda secreta de los Elfkins con diversión y adrenalina. Para disgusto de los miembros más mayores de su clan, que quieren que todo siga igual. Pero cuando Elfie conoce a Bo un día, su vida da un giro inesperado. Bo pertenece a un clan Elfkin cuya filosofía gira en torno a la diversión y el uso de gadgets de alta tecnología para hacer cosas atrevidas y no necesariamente legales, razón por la cual la obsesiva agente de policía Lanski y su intrépida gata policía Polipette los persiguen. ¿Podrá la amistad entre Elfie y Bo reconciliar a los dos clanes Elfkin tras más de 250 años y hacer realidad el sueño de Elfie de vivir como una “Súper Elfkin”?
Producción alemana en la que director y guionista ofrecen una película que tiene mucho que ver con la reciente Pitufos, comentada aquí: ambas abordan la temática de la identidad propia ya que los protagonistas se sienten, en cierto modo, como peces fuera del agua entre los suyos. En la que nos ocupa, Elfkin siente que no encaja en su clan: ella es atrevida, aventurera y no puede estarse un minuto quieta, mientras que sus mayores apuestan por la tranquilidad, eso sí, siempre cumpliendo dos máximas: no ser vistos por los seres humanos y ayudar a gente necesitada sin que éstos se enteren. Una tercera característica sería el día a día sin aparatos electrónicos de ningún tipo, todo es analógico. No es así el clan de Bo, quienes se mueven mucho más y se muestran a gusto con la tecnología, pero su máxima es muy distinta: hacer planes muy atrevidos y hasta arriesgados… sin ayudar absolutamente en nada, de hecho todo lo contrario, disfrutando de molestar a los humanos sin que éstos sepan qué está ocurriendo ya que no les ven. Donde sí se diferencian claramente es en el villano: mientras en la saga pitufa Gargamel y su odioso gato detestan a los pequeños seres por razones poco o casi nada explicadas, en esta la agente de policía tiene motivaciones mucho más claras que hacen imposible odiarla, hasta se la coge cariño cuando se la escucha y se la entiende. Sin ser un villano, sirve de antagonista y además muestra humanidad y resulta en un personaje bastante divertido al que acompaña un gato que también se acaba haciendo querer.
Y la historia es un clásico: dos clanes muy distintos y peleados tienen en sus senos dos personajes que entablan amistad y de los que podrían aprender mucho si les escuchasen y estuvieran dispuestos a aprender. O lo que es lo mismo: una llamada al respeto y la tolerancia del distinto, que no por ser distinto tiene que ser obligatoriamente malo.
En cuanto a la animación, es sencilla pero lograda y de gran colorido, sin duda muy atractiva para el público infantil, con pasajes muy divertidos como el intento de “robo” a la heladería. Queda muy bien, por cierto, lo que se muestra de la Catedral de Colonia, aunque se podría haberla enseñado un poco más más, al igual que el resto de la ciudad, ya que apenas se ven unos retazos muy limitados.
Como curiosidad, el guiño que se ofrece a una de las obras maestras de Pixar, Ratatouille (Brad Bird, 2007), y también el guiño metacinematográfico que se hace del mismo arte del cine, mostrando el director buen gusto por ambos.
Como decimos, es una película muy sencilla (76 minutos que se pasan volando) que transmite mensajes positivos como el respeto, la apertura a los demás y la invitación a ayudar al prójimo. Gustará tanto a los padres como a los hijos.
Ficha técnica

- Título Original: Die Heinzels: Neue Mützen, Neue Mission
- Dirección: Ute von Münchow-Pohl
- Guión: Jan Strathmann, Claudio Winter
- País: Alemania
- Año: 2024
- Duración: 76 min.
- Género: Aventuras
- Productora: ARX Anima Animation Studio, Akkord Film Produktion GmbH, SERU Animation, Tobis Film
- Música: Alex Komlew
- Fotografía: Animación, Francesco Paglia
- Estreno en España: 14/8/2025