[María Dolores Valdés. CinemaNet]
CinemaNet se presentó en Valencia el pasado 30 de Abril, con gran interés del público asistente y la presencia de Daniel Arasa y Jerónimo José Martín
En el Colegio Mayor Albalat y ante un público muy interesado, entre los que cabe destacar a representantes de las fundaciones Mainel y Dasyc, así como miembros de la Universidad Católica de Valencia, tuvo lugar la presentación de la Asociación CinemaNet en Valencia. Para ello contamos con la presencia de Daniel Arasa, quien inauguró el acto, explicando brevemente qué es CinemaNet, cómo surgió y la evolución que ha sufrido la Asociación hasta tener personalidad jurídica propia y ámbito nacional, basada en la idea de un cine con valores que pueda servir para transformar la sociedad. Actualmente CinemaNet desarrolla actividades en Barcelona y Madrid desde hace un par de años, y ahora también en Valencia, con vocación de extenderse a otras ciudades españolas. Para continuar con la expansión, comentó Daniel Arasa, se trataría de encontrar un pequeño núcleo de persones en cada ciudad, interesados en realizar actividades relacionadas con el cine.
Al concluir la intervención del presidente de CinemaNet, tuvo lugar la conferencia-colquio a cargo de Jerónimo José Martín, crítico de cine y presidente del Círculo de Escritores Cinematográficos. El tema elegido para este primer acto en Valencia fue «El cine contemporáneo ante la realidad familiar«. Tras reiterar el agradecimiento al Colegio Mayor Albalat, comenzó hablando del marco en que nos encontramos actualmente en la sociedad, con una presión constante de la ideología de género en todos los ámbitos. Para algunos hay distintos modelos de familia, comentó, sin emabargo la familia sólo es una, y el cine se resiste a la manipulación de la ideología de género imperante, pues al ser drama, se niega a desdramatizar situaciones profundamente humanas. Sin embargo no negó la existencia de películas marcadamente ideológicas, poco honestas y manipuladoras al tratar a los personajes de forma maniquea y estereotipada.
El gran paradigma de la libertad es la libertad sexual, y esto nos lleva a un individualismo posesivo. Esa autoafirmación manipulada, que proviene tanto del marxismo radical como del capitalismo radical, y tanto desde el cine americano cono desde el europeo se muestra esta realidad como negativa. El gran malvado del cine es el individualismo, las grandes películas de los últimos años son anti-individualistas (Slumdog Millionaire, Crash, Babel, La escafandra y la mariposa…).
¿Cómo afecta todo esto a la visión de la familia que nos transmite el cine? Podemos encontrar distintos ámbitos, según siguió diciendo Jerónimo José Martín. Por un lado nos llega la interacción del hombre y la mujer que forma el núcleo de la familia. Aparece la complementariedad entre los sexos, base del matrimonio. Así tenemos la película Casomai (Comprométete) en la que además se recuerda la importancia de la sociabilidad humana, la necesidad de que todos nos ayudemos y así poder salir adelante en las crisis familiares. Otra vez, por tanto, se lucha contra el individualismo.
En el ámbito post-marxista se hace «examen de conciencia» con el nuevo cine social europeo. Así encontramos películas como «Los gritos del silencio» en que se nos muestra como la familia era considerada vomo un lugar de alienación en el marxismo, con el rechazo que esto produce al contemplarlo. Ahora se dan cuenta de que han creado una sociedad profundamente individualista, y que necesitan crear vínculos de solidaridad, incluso para enseñar de padres a hijos en qué consiste el socialismo. Vemos pues cómo están recuperando el valor de la familia e incluso de la religión. Tenemos muchos ejemplos de este caso: Héctor, Lloviendo piedras, Secretos y Mentiras, Los lunes al sol, Mataharis…En muchos casos los autores de las cintas ni siquiera son conscientes de lo que están transmitiendo, pero lo cierto es que en sus películas vemos cómo se valora la familia.
En Estados Unidos, el capitalismo radical también ha dado lugar al individualismo, que lleva a la soledad más absoluta y a la incomunicación. Muy interesante como reflejo de este rechazo es la película «In good company» donde se comparan dos modelos de familia, una abierta a la vida, en la que el trabajo ocupa el lugar que le corresponde, en la que existe diálogo entre padres e hijos…y otra en la que prima el individualismo, cada uno va a lo suyo y al final consiguen una gran soledad.
El sufrimiento también afecta a la familia, y las distintas maneras de afrontarlo les hace crecer. ASí en películas como Juno es de gran importancia el apoyo familiar a la hora de afrontar un embarazo adolescente no deseado. La familia la acoge, la ayuda y gracias a eso se pueden buscar otras soluciones diferentes al aborto.
También se trató en la conferencia el tema de las familias numerosas en el cine, poniendo como ejemplo «Doce en casa«, que en clave de comedia plantea también dos modelos de familia como arquetipo. Por una parte la familia protagonista en que los hijos son una bendición y un don…y por el otro lado una familia en que la maternidad es entendida como un derecho y el hijo como una posesión. En estos últimos meses han aparecido varias películas en las que se reivindican las relaciones paternofiliales así como la fraternidad: el derecho de los hijos a tener hermanos. Como ejemplo se citaron: Cómo entrenar a tu dragón, Brothers (hermanos) y «La niñera mágica y el big bang«.
Por último, para terminar, se hizo alusión a las súper familias que encontramos en películas como «Descubriendo a los Robinson«, «Angeles, SA» y «Los increibles«. El retrato que hacen de la familia es certero, en esta última citada se elogia la feminidad que se ve realizada en la maternidad de la protagonista, la hace crecer, y las situaciones que encontramos, son profundamente humanas.
Ya en el turno de preguntas se mencionaron también películas como «Bella«, «Prueba de fuego» o «Up«, cuyos diez primeros minutos son toda una declaración de lo que realmente es un matrimonio.
Galería de Fotos: Presentanción de CinemaNet en Valencia
(Nota: Fotos de Vicente García Menacho, video de María Dolores Valdés)
Y no olvidemos el interesante contrapunto étnico en el que las películas indias, chinas, etc. presentan los valores de familia precisamente como núcleos de solidaridad en un mundo profundamente individualista (especialmente en la perspectiva de aquellas áreas geográficas). Si el cine moderno ha descubierto las ideas en valor de ese postmarxismo -aunque realmente, como dice el artículo, muchos no sepan qué están transmitiendo- bienvenidos sean los cineastas que se convierten en hilo conductor de objetividades reales. De todas formas, hay que reconocer que la ideología de género ya aburre al más pintado. Ahora se intenta con la laicización como moda recurrente y siempre tratarán de salir a la palestra «revoluciones ideológicas» como estilo de diferenciación para captar adeptos. Afortunadamente, las crisis de valores parecen ser temporales aunque cambien de traje pero sin duda hay que contrarrestarlas con la mayor objetividad de todas: la verdad (al pan, pan; y al vino, vino).