[Susana García. Colaboradora de Cinemanet]
El tiempo de Adviento es un tiempo propicio para trabajar con los niños y jóvenes películas que fomenten sentimientos y valores como la empatía, la generosidad y la solidaridad con quienes más lo necesitan. Si además están relacionadas de algún modo con la Navidad y el espíritu cristiano serán de gran ayuda para volver a los orígenes de la Navidad, huyendo del espíritu consumista que inunda las calles en esta época y encontrándonos con la LUZ que ilumina el mundo.
Películas propuestas
- Natividad
La película Natividad es una película sencilla y bíblica sobre las circunstancias que rodearon el nacimiento de Jesús según nos cuentan los evangelistas Mateo y Lucas. Para todos los públicos, es ideal para los niños y jóvenes y no se hace demasiado larga para los más pequeños, aunque la segunda parte del viaje de María y José a Belén es de ritmo más lento. La idea de la película surge precisamente de una inspiración en las navidades de 2004, cuando el guionista cristiano Mike Rich se le ocurrió hacer un guión precisamente sobre las dificultades que habían tenido María y José en el camino hacia Belén y los retos a los que se habían tenido que enfrentar tanto en su noviazgo como en el camino. Le surgieron un montón de preguntas y se puso a investigar quiénes eran María y José y qué decisiones y elecciones tuvieron que tomar, leyendo los Evangelios de Mateo y Lucas e investigando sobre la sociedad y cultura de la época, consultando a numerosos expertos historiadores y teólogos.
Para la dirección se escogió precisamente a una mujer, Catherine Hardwicke, que trató de humanizar a los protagonistas para inspirar precisamente a los jóvenes a hacer frente a sus propios retos y dificultades. Ella eligió un reparto multicultural de actores, con Keisha Castle-Hughes como María, actriz nominada a un Oscar por su trabajo en Whale Rider y Oscar Isaac como José. Y precisamente Oscar ha realizado una de las mejores interpretaciones de José, emocionándonos a todos en la escena del nacimiento en Belén. El reparto incluyó actores de Jordania, Irán, Nueva Zelanda, Guatemala, Camerún, Sudán, Reino Unido, Francia e Italia. Aunque la directora viajó a Nazaret y Belén para buscar el mejor lugar para el rodaje de la película descartó ambas ciudades por la modernización que habían sufrido. Tuvieron que recrear ambos pueblos con la ayuda de expertos en la época y visitando casas y sinagogas del siglo I. Eligieron una zona del Sur de Italia, Matera, que ya se había usado como escenario para El Evangelio según San Mateo y todo el equipo comenzó a recrear el pueblo, los olivares, las casas, el pozo y la zona de las cuevas de Belén.
Es muy importante fijarse durante la película en los oficios y labores que aparecen realizando los personajes, ya que están muy bien reconstruidas. Nos puede servir de actividad didáctica con los niños y jóvenes para que descubran cómo se hacía el pan, el queso o se prensaba el aceite de oliva en aquella época. Para el pueblo de Isabel, el camino a Belén y el palacio de Herodes eligieron una zona del sur de Marruecos muy adecuada también para reconstruir el poblado de Mesopotamia por el que pasan los Reyes Magos. Y el desierto que cruzan es realmente el desierto del Sáhara. Son precisamente los Reyes Magos los que dan ese punto cómico a la película con diálogos que hacen reír a los más pequeños.
A nivel didáctico es muy interesante trabajar los escenarios de la vida de María y José, así como la reconstrucción del país, las casas, la cultura y tradiciones de la época. Además se pueden trabajar los textos bíblicos más importantes relacionados con la anunciación y nacimiento de Jesús y ver las similitudes y diferencias con la película, aunque como podrán comprobar profesores y alumnos la película es muy fiel a los textos bíblicos. Trabajar los personajes y las difíciles decisiones que tuvieron que tomar es también importante, así como otros aspectos de la religión judía y la cultura hebrea, como la circuncisión, las costumbres relacionadas con el noviazgo y el matrimonio, el papel de la mujer o las tradiciones y sacrificios que se hacían en el Templo de Jerusalén.
Maktub es una película excepcional, con “alma”, que nos ayuda a recuperar el espíritu y la alegría de la Navidad. Mezcla entre drama y comedia, nos hará reír y llorar al mismo tiempo. Imprescindible para trabajar tanto con jóvenes como con adultos la película presenta valores como la búsqueda de sentido de la vida y de respuestas a las grandes preguntas, la fidelidad, la fe, la capacidad de perdonar, el problema de la enfermedad y la muerte, la apertura a la trascendencia o la importancia de la familia para apoyarnos en los momentos difíciles y para disfrutar de las pequeñas alegrías de la vida.
Su director, Paco Arango ha conseguido llevar a la pantalla una historia, que a pesar de que habla sobre la muerte y la pérdida está llena de vida. Y es que la película está basada en la historia real de Antonio, un niño canario con cáncer que Paco conoció en el hospital cuando realizaba voluntariado e incluso comenzó a escribir el guión junto a él y que interpreta un simpático Andoni Hernández San José. Grandes actores completan el reparto como Aitana Sánchez Gijón, Diego Pereti, Amparo Baró, Goya Toledo o Rosa María Sardá.
La película comienza presentándonos a Manolo, un hombre de mediana edad, padre de familia, que se encuentra en medio de una crisis familiar y una vida “apagada” por la rutina. Su matrimonio está a punto de romperse y vive una situación de falta de comunicación tanto con su mujer como con sus hijos, especialmente con su hijo adolescente. Pero todo cambia cuando conoce a Antonio, un niño con cáncer que le pide que se haga pasar por su padre para conseguir hacerse una prueba médica sin tener que acudir otra vez al hospital. La alegría, la fe y la esperanza de Antonio le cambian profundamente y no solo a él, sino también a toda su familia. Todo ello en el marco de las celebraciones navideñas y con la ayuda de un “ángel” muy especial, una simpática “Lupita” interpretada por Rosa María Sardá.
A nivel didáctico y espiritual es importante trabajar los valores de Antonio, así como su fe y esperanza. La conciencia de tener una misión en esta vida que Dios le ha dado y su serenidad ante la muerte. También es una oportunidad para dialogar sobre las relaciones familiares, la rutina o la falta de comunicación y cómo vivimos los creyentes la Navidad, ya que puede ser también un tiempo para ser más solidarios y acompañar a los que más lo necesitan, como hizo Manolo invitando a Antonio y a su madre para que no pasaran “solos” la Navidad.
En definitiva, un “cuento mágico de Navidad” que nos habla del misterio del sufrimiento y de la importancia del amor, la fe y el perdón para superar los obstáculos que nos encontramos en el camino de la vida
“Cuento de Navidad” es un relato corto publicado por Charles Dickens en 1843 que se convirtió en un cuento navideño para muchas generaciones y es uno de los relatos más bellos de la literatura inglesa. La película, dirigida por Robert Zemeckis en 2009, lleva la historia del señor Scrooge a la animación 3D con la técnica de la captura del movimiento.
Jim Carrey es un hombre mezquino, amargado e insensible que no celebra nunca la fiesta de Navidad y que le da de mala gana a su leal empleado Bob (Gary Oldman) el día libre para poder estar con su familia. Pero esa noche recibe una visita muy especial, el espíritu de su antiguo amigo y socio Jacob Marley, que había muerto siete años antes. Marley le cuenta que está condenado a llevar una pesada cadena que arrastrará toda la eternidad por su avaricia e insolidaridad y a que a él le pasará lo mismo. Le anuncia que se le presentarán tres espíritus de la Navidad: el espíritu de la Navidad pasada, el de la presente y el de la futura. El espíritu de la Navidad pasada le recuerda cómo era su infancia solitaria y a su hermana Fanny, de cuya muerte nunca se recuperó. También le recuerda a su antigua novia y su ruptura debido a su obsesión por acumular riqueza, dando la espalda a una vida de amor y felicidad. Con el espíritu de la Navidad presente descubre cómo realmente es y la desesperada situación de la familia de su empleado Bob, que tiene un hijo enfermo, Tom, pero a pesar de todo celebran como pueden la Navidad. El espíritu le muestra en su viaje a su sobrino (Colin Firth), que celebra alegremente la Navidad con su familia y precisamente le había invitado, pero rechazó acudir. El espíritu de la Navidad futura es el más tenebroso. No habla y le muestra el destino de los avaros, como él… la muerte solitaria. Ante esta situación Scrooge descubre lo verdaderamente importante en la vida e intenta cambiar su destino, siendo generoso con su empleado y con su familia, cambiando incluso su semblante y mostrando la alegría que da un corazón generoso.
A nivel didáctico la película es muy importante ya que se trabaja un clásico de la literatura con numerosos valores que ayuda a niños y jóvenes a reflexionar sobre lo realmente importante en la vida: el amor, la familia y la amistad, así como el valor de la generosidad, el arrepentimiento y la conversión.
- Millones
Una película especialmente recomendada para niños a partir de 9 años, dirigida por el británico Danny Boyle a modo de «fábula» moral en un ambiente navideño. La película cuenta la historia de Damian, un chico de ocho años que ha perdido a su madre y se acaba de mudar junto con su hermano Anthony y su padre a una nueva casa. Los hermanos se enfrentan a la muerte de su madre de una forma totalmente diferente. Anthony, el mayor, parece que lo lleva bien e incluso intenta “sacar provecho”de la situación. Damian la echa mucho de menos y tiene esperanza de que esté en el cielo, como una santa más, velando también por él. No sabemos si es o no realidad o su imaginación, pero se le aparecen algunos santos, como San José, Santa Clara, San Pedro, San Nicolás o los mártires de Uganda y a todos les pregunta si han visto a su madre. Ellos le van aconsejando y orientando en sus problemas y dificultades.
Un día encuentra un maletín lleno de dinero, que le cae «del cielo» y, sin decírselo a su padre, decide ayudar a los demás, aunque su hermano prefiere gastarlo en cosas para ellos… El problema es que quedan pocos días para el cambio de libras a euros y luego el dinero ya no valdrá nada…Pero pronto descubre que el dinero en realidad ha sido robado y varios ladrones están en su búsqueda, por lo que la vida de su familia está en peligro.
La película es muy interesante porque permite hablar de temas como la fe, el poder «corruptor» del dinero y cómo puede cambiar a las personas o también cómo hay alternativa, cómo se puede hacer el bien con el dinero. Aunque las apariciones de los «santos» son muy «surrealistas», tienen conversaciones interesantes, como por ejemplo, la de San Pedro, que además le explica su versión del milagro de la “multiplicación de los panes y peces” y da pie a dialogar con niños y jóvenes sobre los santos, su misión, la vida eterna…
Película imprescindible para trabajar en el aula sobre la histórica tregua de Navidad en la Nochebuena de 1914, durante la I Guerra Mundial. El hecho ocurrió en las trincheras del frente Ypres (Bélgica) en el que se había decretado una tregua esa noche que acabó en gestos de convivencia entre «enemigos». Y es que el director, que realizó un gran proyecto de investigación para poder llevar a cabo la película nos recuerda: «En muchas ocasiones el enemigo no se encuentra al otro lado de la trinchera, sino entre los propios encargados de dar las órdenes y organizar la guerra». Que además, por cierto, no suelen morir en batalla… Pero ¿cómo comenzó todo? En Nochebuena las tropas alemanas empezaron a decorar sus trincheras y cantar villancicos, especialmente «Noche de paz» y luego los británicos continuaron entonces con «Adeste fideles» y otros villancicos e incluso los escoceses tocaron sus gaitas. Pronto empezaron los gestos de «camaradería» como el intercambio de pequeños regalos: chocolate, whisky, cigarrillos y permitiendo que se celebraran ceremonias fúnebres con soldados de ambos bandos, leyendo juntos el Salmo 23 «El Señor es mi pastor, nada me falta… aunque camine por valles oscuros no temeré mal alguno porque Él está conmigo». En algunos lugares celebraron juntos ceremonias religiosas e incluso jugaron partidos de fútbol “improvisados”. Uno de los gestos más emotivos es un partido de fútbol que jugaron durante una hora, aunque el terreno estaba helado… el deporte y la música son ideales para confraternizar.
La tregua se extendió e incluso duró hasta el año nuevo en algunas zonas, cansados de una guerra sin sentido entre cristianos, pero pronto sus superiores se opusieron a la tregua con numerosas represalias a los soldados, destruyendo muchas cartas en las que contaban a sus familias las anécdotas de la tregua. El obispo, en la película, también reprende al padre Palmer, uno de los personajes más importantes en la trama, que será enviado de vuelta a su parroquia. Pero el sacerdote explica por qué lo hizo: «Mi lugar está entre los que padecen y han perdido la fe. Mi lugar está aquí, responde el padre… Creo que Jesucristo me guió en la que fue la misa más importante de mi vida. Traté de transmitir su mensaje a todos fueran quienes fueran».
A nivel didáctico es una película muy interesante para trabajar con los jóvenes en los últimos cursos de la ESO y Bachillerato, con un enfoque interdisciplinar.
¿Y algún corto para inspirarnos y dialogar sobre los valores auténticos de la Navidad?
En primer lugar tenemos un corto, que en realidad es uno de los mejores anuncios de Navidad de la empresa Sainsbury´s sobre la Navidad de 1914. Aunque no es de temática religiosa volvemos a recordar la tregua y el valor de la paz y la generosidad. Una interesante opción para conocer un poco sobre esta historia y para quienes no opten por realizar un cineforum con la película. Con el corto de La pequeña cerillera revivimos una de las historias más emotivas de Hans Christian Andersen que nos recuerda la importancia de vivir con los ojos bien abiertos a las necesidades de los demás y con el que podemos dialogar con los más pequeños la importancia de la empatía, la solidaridad, la fe y la esperanza. Por último, con el corto cristiano Ilumina el mundo se nos invita a compartir la luz de Jesús con gestos de amor y solidaridad. Es una campaña navideña de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos días muy aprovechable para trabajar en grupos cristianos y dialogar sobre el verdadero sentido de la Navidad.