Este premiado filme alemán sigue los pasos de la revisión histórica del comunismo del este europeo, y que tantos títulos interesantes nos ha dado en los últimos años. Se centra en la perspectiva íntima y singular de una mujer de la Alemania del Este en los años setenta del siglo pasado, cuyo sueño es huir a Occidente.
ESTRENO RECOMENDADO POR CINEMANET
Título original: Barbara
País: Alemania
Año: 2012
Dirección: Christian Petzold
Intérpretes: Nina Hoss, Ronald Zehrfeld,Rainer Bock, Christina Hecke
Guión: Christian Petzold, con la colaboración de Harun Farocki.
Música: Stefan Will
Fotografía: Hans Fromm
Distribuidora en cine: Schramm Film Koerner & Weber
Duración: 105 min.
Género: Drama
Estreno en Alemania: 8 Marzo 2012
Estreno en España: 5 de Abril de 2013
SINOPSIS
Bárbara (Nina Hoss) es una médico represaliada y enviada a un hospital de provincias bajo un férreo control de su vida y movimientos. Su jefe es un médico afable, André (Ronald Zehrfeld), del que Bárbara empieza a sospechar que comulga con su odio al régimen comunista.
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CRÍTICAS
[Juan Orellana – Cope]
Este premiado filme alemán sigue los pasos de la revisión histórica del comunismo del este europeo, y que tantos títulos interesantes nos ha dado en los últimos años: “La vida de los otros”, “Katyn”, “Popieluszko”, “Good Bye, Lenin!”, “R.A.F. Facción del Ejército Rojo”, “Si no nosotros, ¿quién?”, “Cómo celebré el fin del mundo”… Si algunos de esos títulos optaban por una clara exposición política crítica, como “La vida de los otros”, “Bárbara” se centra en la perspectiva íntima y singular de una mujer de la Alemania del Este en los años setenta del siglo pasado, cuyo sueño es huir a Occidente. El marco político es un fondo nebuloso, casi como una atmósfera psicológica, tangible sólo en el lúgubre y siniestro oficial de la Stasi, Klaus Schütz (Rainer Bock). Bárbara es una médico represaliada y enviada a un hospital de provincias bajo un férreo control de su vida y movimientos. Su jefe es un médico afable, André, del que Bárbara empieza a sospechar que comulga con su odio al régimen comunista.
El director y guionista Christian Petzold (“Yella”, “Jerichow”) —ganador del Oso de Plata en Berlín 2012 por esta película— se centra deliberadamente en el mundo interior de Bárbara —interpretada magistralmente por Nina Hoss—, que nos contagia miedo, recelo, odio enquistado, heridas morales… Bárbara nos recuerda al típico perro apaleado que vive sobresaltado y huyendo. Bárbara se ha acostumbrado a sobrevivir impidiendo que su rostro exprese cualquier tipo de sentimiento que pueda desvelar sus pensamientos. Por ello el cineasta ha desnudado el filme de banda sonora original —excepto al comienzo—, y ha convertido la sobriedad de Bárbara en el estilo de la película.
[Ricardo Ruiz de la Serna, Pantalla90]
República Democrática Alemana a finales de los setenta. Bárbara, una joven médica planea fugarse a Occidente con su novio cuando la descubren. Después de un tiempo presa, Bárbara es destinada a un pueblo donde la mayor parte de sus pacientes vienen de un campo de prisioneros cercano. Mientras su novio sigue preparando la huida, ella se debate entre irse o quedarse.
Como ven, el argumento de Bárbara (2012) es bastante sugestivo. Con el trasfondo de una historia de búsqueda de amor y libertad, el compromiso y el sufrimiento interpelan a Bárbara y la obligan a tomar partido. Petzold continúa trabajando el conflicto entre libertad y opresión que ya planteaba en Yella (2007) y que impregna su obra cinematográfica, teatral y televisiva.
Una de las actrices de cabecera de Petzold, Nina Hoss, encarna a una protagonista que da rostro a la frustración, el miedo y las ansias de una libertad que se aleja. Junto a ella, Ronald Zehrfeld da vida a un novio que carece de fuerza dramática frente a la doctora que centra toda la atención del espectador. Los actores de reparto son estupendos. Los policías y funcionarios de la RDA tienen la presencia gris que nuestra imaginación supone a los engranajes de un sistema totalitario que tritura a sus víctimas. El director deliberadamente ha huido de los símbolos de la tiranía, de los tonos grises y oscuros de películas ambientadas en la RDA como La Vida de los Otros (Von Donnersmarck, 2006). Sin embargo, ha trasladado esa tristeza a las miradas, los rostros y los silencios.
El debate de fondo sobre el compromiso y la frustración, la libertad y el amor queda abierto. Petzold ha huido de las soluciones fáciles y la moralina dando a los personajes la profundidad existencial que se merecen. Al final, la libertad no es lo que Bárbara pensaba. El sacrificio y el amor rescatan al sujeto de la Historia aunque no del modo que el espectador podía sospechar al comienzo. Disculpen que no les dé más detalles. Vayan a verla.
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