Sinopsis
En el año 2000, Nevenka Fernández, de 24 años, concejala de Hacienda en el Ayuntamiento de Ponferrada, sufre una persecución implacable, tanto sentimental como profesional, por parte del alcalde, un hombre acostumbrado a hacer su voluntad en lo político y en lo personal. Nevenka decide denunciar, aunque sabe que deberá pagar un precio muy alto: su entorno no la apoya, la sociedad de Ponferrada le da la espalda y los medios la someten a un juicio público.
Crítica
Soy Nevenka | Cuando la ética falla, todo se desmorona
De la mano de Icíar Bollaín nos llega una interesante versión cinematográfica de la controvertida historia de Nevenka Fernández, concejala de Hacienda en el Ayuntamiento de Ponferrada, que denunció por acoso sexual, laboral y psicológico, al alcalde, Ismael Álvarez, con quien meses atrás había mantenido una relación.
La opinión pública quedó dividida, y, aunque Nevenka ganó el juicio, no todo el mundo dio crédito a la veracidad de las denuncias. Valga como dato de la diversidad de opiniones, que la misma Asociación para la Defensa de la Mujer Acosada albergó tantas dudas durante el juicio, que dejó de apoyarla.
Tras las elecciones municipales de junio de 1999, la joven Nevenka Fernández, de 24 años, ocupó la cartera de Hacienda en el Ayuntamiento de Ponferrada y poco después parece ser que empezó una relación con el alcalde Ismael Álvarez, en aquel entonces un hombre casado y cuya esposa estaba enferma de un cárcel terminal; en septiembre de 2000, pidió la baja por depresión y se trasladó a Madrid y en marzo de 2001 hizo pública su denuncia. Según ella declaró en el juicio, cuando expresó su intención de romper la relación íntima con Ismael Álvarez, éste empezó una estrategia de acoso a la cual ella no fue capaz de enfrentarse y acabó sumiéndose en una depresión. El juicio fue muy polémico y hasta el fiscal llegó a ser apartado del mismo porque más parecía que ejercía su ministerio sobre la víctima que sobre el acusado.
Ismael Álvarez fue condenado a una pena mínima, pero el proceso tuvo el valor de ser la primera denuncia por acoso a un político influyente y que éste fuera declarado culpable.
La película de Icíar Bollaín, inspirada en la crónica del caso que escribió Juan José Millás a partir de entrevistas directas con Nevenka y de su propio estudio del proceso judicial, hace un relato del caso desde el punto de vista de la víctima. Presenta a un personaje frágil, que no fue capaz de reaccionar a la fuerza de los ataques de un hombre poderoso que no aceptaba el final de su relación, pero que, al cabo de un tiempo, cobró el coraje de hablar.
La cineasta toma incondicionalmente partido por la víctima, pero no la idealiza, no fabula para ajustar o amoldar la historia con el fin de ennoblecer la figura del personaje, sino que su relato no elude ajustarse a la realidad de los hechos tal como sucedieron, de tal modo que, con la perspectiva de casi un cuarto de siglo, el caso nos sigue despertando interrogantes: ¿por qué, cuando empezó a sentirse incómoda por el acoso, Nevenka no denunció?, y si no se atrevía a hacerlo, ¿por qué, sencillamente, no dimitió de su cargo en el Ayuntamiento?, ¿por qué siguió permitiendo que la relación, que ella ya no deseaba, se prolongara de algún modo en el tiempo? Sin embargo, de lo que no nos queda ninguna duda es de que Nevenka Fernández fue una víctima del acoso llevado a cabo por un hombre que la manipuló y se aprovechó de su fuerza frente a la fragilidad de ella.
Estamos ante una nueva magnífica película de Icíar Bollaín, en la que destaca, como suele ser habitual, el personaje femenino sobre todos los demás. Nevenka es el centro y el eje de la historia, el resto son personajes con relación a ella: el acosador, el amigo que la apoya, los compañeros que la abandonan, los padres que no acaban de comprenderla…
Con el personaje de Nevenka, Bollaín nos acerca la experiencia angustiosa de lo que significa sentirse acosada, oprimida por el peso del poderoso; la incertidumbre y la inseguridad que eso provoca, e, incluso, el sentimiento de culpa que puede despertar. La ambientación es excelente y hay que destacar una encomiable labor de los departamentos de peluquería y maquillaje, que nos ofrecen una imagen expresiva del proceso de hundimiento anímico de la joven, así como de su cambio paulatino hasta su vacilante determinación de actuar, venciendo los miedos, resistiendo amenazas y arrostrando sinsabores.
El guion, escrito en colaboración por Isa Campo y la misma Icíar, es sencillamente redondo, pero lo más destacable de la película es la dirección de actores. Mireia Ortiz está espectacular en su personaje de Nevenka, al principio, llena de ilusiones pero tan frágil como para ser una presa fácil ante un depredador sin escrúpulos, después, desolada y hundida pero capaz de reconstruirse para clamar justicia. Por su parte, Urko Olazabal, que ya se alzó con un Goya a Mejor Actor de Reparto, por su trabajo en la anterior película de Bollaín, Maixabel, vuelve a demostrar su gran calidad actoral.
Interesantísima película, que tal vez ayude a formarse opinión sobre ese desagradable y triste suceso de nuestra historia reciente.
Ficha técnica

- Título Original: Soy Nevenka
- Dirección: Icíar Bollaín
- Guión: Isa Campo, Icíar Bollaín
- País: España
- Año: 2024
- Duración: 01h 50 min min.
- Género: Drama
- Interpretación: Mireia Oriol, Urko Olazabal, Ricardo Gómez, Carlos Serrano, Lucía Veiga, Luis Moreno, Mercedes del Castillo, Font García, Mabel del Pozo, Pepo Suevos
- Productora: Kowalski Films, Feelgood Media, Movistar Plus+
- Fotografía: Gris Jordana
- Estreno en España: 27-09-2024
Si la película es tan buena, ¿por qué le ponéis una nota tan mediocre?