Sinopsis
Nos sumerge en la oscura realidad de un reformatorio de Florida durante los años 60, donde el racismo y la violencia institucional dejan cicatrices imborrables en la vida de dos jóvenes afroamericanos. A través de una narrativa poderosa y una estética cruda, la película explora la resistencia y la supervivencia en un entorno hostil, recordándonos el impacto duradero de la injusticia sistémica.
Crítica
Nickel Boys | Incómoda y singular belleza
En ocasiones uno se encuentra con este tipo de joyas diferenciales, películas que no buscan complacer con lo fácil sino provocar llevándote por el camino angosto. No priorizan el aplauso sino clavar su concepto en nuestra conciencia. Nickel Boys es la adaptación cinematográfica de la novela de Colson Whitehead que dirige RaMell Ross como relato del racismo sistémico en un contexto reformatorio de la Florida de los 60, nunca fácil, siempre un desafío.
De páginas sombrías a luz cinematográfica
El gran reto del director es adaptar la visceralidad de la obra original, en cierto modo trasladar cómo la novela de Whitehead se acoge a la inspiración de hechos reales para expresar la crueldad de un sistema que erradica vidas bajo la galería reeducativa. Ross se adentra en una narración más bien austera, casi documental, para esquivar el peligro del sensacionalismo. De este modo retrata la realidad sin filtros, artificios emocionales ni manipulación auditiva.
Gran acierto tomar este camino en Nickel Boys, acomodando la esencia de las líneas a un ritmo pausado que simula un transcurrir del tiempo atormentado por un infernal tempo vital en la institución. He de añadir que la fotografía de Jomo Fray pulula cual radical elemento narrativo en los espacios más importantes del reformatorio, a menudo sin llamar la atención, pero siempre capturando la opresión en cada plano.
El arte de incomodar
Es entonces cuando llega el conflicto fundamental, pues la cinta de Ross no quiere conmover con vacías experiencias emocionales, sino más bien zarandear intelectualmente mientras te arrastra con sentimientos más puros. Es distinto, ya que el enfoque se despoja deliberadamente de condicionarte con trampas, prefiere exigir tu participación voluntaria. Esta tónica también se observa en unas interpretaciones contenidas al máximo, en cada gesto, mirada o grito esfumado.
Este punto es el que sin duda generará algo de crispación. Es en la distanciación donde el espectador está más exigido, no ha de esperar una catarsis mascada, se le requiere una reflexión profunda sobre el horror mostrado. A favor de este proceso juega la sobriedad estética que acompaña a los poderosos diálogos, jugando al contraste entre los rojos de Florida y la colorida frialdad de las celdas.
Un valor artístico para atrapar
Nickel Boys es una propuesta muy valiente. El director toma decisiones ajenas al victimismo. Si nos fijamos, huye también de la violencia explícita y opta por sugerir y susurrar al oído. Claro, el poder de la incertidumbre, que es lo realmente complicado de transmitir, es lo que a su vez conquista de todas todas. Un sonido, una mirada, o la expresión facial ante un problema.
La perturbación es más orgánica, aunque arriesgada, sumándose así al atrevimiento narrativo acometido con la narración fragmentada. En cierto modo actúa como reflejo del viaje del dolor, el sufrimiento de los protagonistas, el futuro truncado o la pérdida de la alegría.
Nickel Boys es una película para disfrutar, sí, pero no en un sentido convencional, ya que debe y merece ser afrontada con buena disposición, voluntad de reflexión y mente muy abierta. No esperes comida rápida emocional, sino unos arcos narrativos excepcionalmente situados y desarrollados. Esta valiente obra social no hace concesiones, desafía nuestras zonas de confort y recuerda con fuerza que el cine también ha de cuestionarnos. Joya imprescindible entre tanta superficialidad.
Ficha técnica

- Título Original: Nickel Boys
- Dirección: Ramell Ross
- Guión: RaMell Ross, Joslyn Barnes. Libro: Colson Whitehead
- País: Estados Unidos
- Año: 2024
- Duración: 140 min.
- Género: Drama, racismo, hechos reales
- Interpretación: Ethan Herisse, Brandon Wilson
- Productora: Orion Pictures, Plan B Entertainment, Louverture Films, Anonymous Content. Distribuidora: Metro-Goldwyn-Mayer (MGM)
- Música: Scott Alario, Alex Somers
- Fotografía: Jomo Fray
- Estreno en España: 27 de febrero de 2025
Me parece fantástica como la presentas…pienso que puede aportar mucho. Gracias por trabajarlo tan a fondo y con tanta originalidad y rigor
¡Un placer!