El documental nos muestra cómo la masiva devoción polaca a María, ridiculizada y perseguida por los comunistas, de pronto se convirtió en la fuerza de la Iglesia. El Primado Wyszynski fue el símbolo de la resistencia a la dictadura atea. “Ningún Zar va a sentarse sobre el altar”, profetizó desde la cárcel. Y de ese corage surgió la figura de Karol Woytila, el Papa que debió ser asesinado. ¿Qué milagro le hizo sobrevivir al disparo certero de un asesino profesional?