Estimable drama que toca con mirada incisiva temas como la maternidad y la paternidad heridas, los efectos del divorcio en los hijos y, en general, la importancia del amor en la vida de las personas. La película supera su irregular guión gracias a una puesta en escena naturalista y a las interpretaciones del trío protagonista, con las que el director consigue mantener la intriga y la tensión sin extender el melodrama.
![]() |
ESTRENO Título original: Labor Day. |
SINOPSIS
Henry Wheeler es un niño de 13 años que se esfuerza por ser el hombre de la casa y cuidar de su solitaria madre en pleno torbellino de la adolescencia. Un día, ambos conocen a un hombre necesitado de ayuda que les convence de que le lleven a casa, donde descubren que es un convicto fugado. El interminable fin de semana del Día del Trabajo les marcará para el resto de sus vidas.
¡Debate esta película en nuestros foros!
CRÍTICAS
[Jerónimo José Martín – COPE]
Después de triunfar entre el público y la crítica con “Gracias por fumar”, “Juno” y “Up in the Air”, el canadiense Jason Reitman —hijo del también cineasta Ivan Reitman— mostró un cierto desfallecimiento creativo en “Young Adult” (2011). Ahora lo confirma en “Una vida en tres días”, adaptación de la novela “Como caído del cielo”, de la estadounidense Joyce Maynard, madre del actor Wilson Bethel y autora del ‘best seller’ “Todo por un sueño”. Se trata de una película tan estimable como “Young Adult”, pero sin la chispa y hondura de los tres primeros largometrajes de Reitman.
Verano de 1987, en una pequeña localidad de New Hampshire. Tras el divorcio de sus padres, Henry Wheeler (Gattlin Griffith), de 13 años, se ha convertido en el hombre de su casa, donde cuida como puede a su deprimida madre, Adele (Kate Winslet), que arrastra un doloroso pasado y tiene la autoestima por los suelos. La vida de ambos cambia radicalmente cuando un hombre misterioso los aborda en un supermercado, obligándoles a ocultarle en su casa. Pronto comprenden que se trata de Frank (Josh Brolin), un peligroso convicto que se ha escapado de la cárcel, donde cumplía una condena de 18 años por asesinato. Con él pasarán el largo fin de semana del Labor Day (Día del Trabajo).
La película padece un guión irregular, que pasa de un largo planteamiento bastante sólido a un desarrollo algo tópico y epidérmico, hasta culminar en un desenlace demasiado abrupto y un epílogo convencional. De todas formas, el conjunto se sostiene gracias a una esmerada puesta en escena naturalista, y a las excelentes interpretaciones del trío protagonista —Kate Winslet optó por su trabajo al Globo de Oro a la mejor actriz dramática—, a través de las que Jason Reitman logra mantener la intriga y la tensión sin extremar el melodrama. Además, siempre ofrece una mirada incisiva y nada complaciente sobre la maternidad y la paternidad heridas, los efectos nocivos del divorcio en los hijos, la necesidad de un padre —sobre todo en la adolescencia— y, en general, la decisiva importancia del amor en la vida de las personas.
¡Debate esta película en nuestros foros!