Sinopsis
En el Londres de 1950, tras el desastre de la II Guerra Mundial, Reynolds Woodcock pone su alma en cada puntada. Es el mejor sastre de la ciudad, y a su taller acuden en masa princesas y baronesas para ser vestidas por él. Su rígido y solitario esquema vital, sin embargo, se verá truncado cuando -en un viaje de reposo al campo- conozca a Alma, una joven que se convertirá en su musa y amante.
Crítica
Amor deshilachado
Por muchos años que pasen, hay historias que seguimos contándonos una y otra vez. Paradigmas eternos que los humanos nos repetimos, bajo diferentes rostros y contextos. El amor imposible entre bandos opuestos, la odisea de un regreso al hogar, el misterioso mito de Pigmalión y Galatea… y que no se entienda esto como una digresión aleatoria: para entender el logro de Paul Thomas Anderson en su recién estrenada película El hilo invisible, conviene explorar el último de los relatos citados.
La historia original griega habla de un rey de Chipre enamorado de una bellísima estatua bautizada como Galatea. Embebido por la perfección de sus formas, el monarca -llamado Pigmalión- bebía los vientos por ese bloque de mármol hasta que, en respuesta a sus ruegos, Afrodita insufló vida a la piedra, volviéndola carne dulce y cálida. Tenemos, en resumen, el relato de cómo la voluntad del enamorado obsesivo transforma al objeto de su fijación.
Ruby Sparks, Mi bella dama, Pretty woman… la lista de películas que giran en torno a esta misma idea da para largo, y ahora se le une El hilo invisible. En este film -ambientado en el Londres herido tras la 2ª Guerra Mundial-, se nos presenta a un Pigmalión de manual en el protagonista, el obsesivo y prestigioso sastre Reynolds Woodstock (Daniel Day-Lewis), y a una inocente Galatea en Alma (Vicky Krieps), la camarera de quien el primero queda prendado.
La película abre replicando el modelo que ya conocemos -a través de sus vestidos, él la convierte en un ser distinto, en una modelo integrada en el ambiente chic de la alta sociedad londinense-, pero se desarrolla desafiando las expectativas del público. No es momento este para destripar la trama, pero cabe señalar que Anderson -aquí también guionista- subvierte el mito para plantar una serie de reflexiones interesantes acerca del amor.
La evolución de la relación entre Reynolds y Alma nos permite pensar acerca de la naturaleza del amor: ¿qué significa amar? ¿Es la satisfacción egoísta de los propios impulsos y los propios deseos? ¿Es la búsqueda del bien del otro? Se plantea el dilema de amar como uno quiere o amar como el otro necesita. Por otro lado, también se entra en la dificultad de querer que puede desarrollar un hombre absorbido por su trabajo, obsesionado por algo hasta el punto de tratar al resto como muebles -o, en este caso, como maniquíes-.
El hilo invisible funciona como una doble pirueta de la que emergen todos estos temas de modo natural, gracias a un guion sólido y bien medido. Daniel Day-Lewis aporta savoir faire y gravedad a un personaje que -dicen- será su canto de cisne en esto de la actuación, y la joven Vicky Krieps le da la réplica en una interpretación no menos meritoria, cargada de insolencia y personalidad. Por lo demás, en lo técnico cabe apuntar el buen trabajo hecho en el montaje de sonido -atención a las secuencias de desayuno-, en el vestuario -no podía ser de otra manera: hablamos de un sastre- y en la fotografía.
El trabajo de recreación de la época nos sumerge en un mundo de talleres y desfiles para la nobleza, mientras que la música -pianos y cuerdas a todo trapo- embriaga en su clasicismo. Una película, en definitiva, sólida que, en su subversión del mito atemporal de Pigmalión y Galatea, abre la puerta a pensar en qué significa hoy amar. Qué significa estar unidos -o separados- por un hilo invisible.
Ficha técnica

- Título Original: Phantom Thread
- Dirección: Paul Thomas Anderson
- Guión: Paul Thomas Anderson
- País: EEUU
- Año: 2017
- Duración: 130 min.
- Género: Drama
- Interpretación: Daniel Day-Lewis, Vicky Krieps, Lesley Manville, Richard Graham, Bern Collaco
- Productora: Annapurna Pictures / Focus Features / Ghoulardi Film Company
- Música: Jonny Greenwood
- Fotografía: Paul Thomas Anderson
- Estreno en España: 2 de febrero 2018