Sinopsis
Película espectacular que recrea el pavoroso incendio que sacudió la emblemática Catedral de Notre Dame de París en abril de 2019, amenazando con devorarlo todo.
Crítica
Tras el fuego, la esperanza
“Todo lo que aquí se dice es verdad, pero todo parece inverosímil”
*Leyenda con la que comienza la proyección
El 15 de abril de 2019, ante la mirada sobrecogida de los turistas y de los habitantes de París, y ante la empatía del resto de Europa, miles de personas asisten, entre aterrorizadas e incrédulas, al virulento incendio de la Catedral de Notre-Dame. El fuego provocó que su emblemática aguja, construida entre los siglos XII y XIV, se derrumbara tan solo una hora después de declararse el incendio, provocando también grandes daños en el ático de la nave central.
En 2020, el prolífico director Jean-Jacques Annaud anunció su intención de recrear en una película este incendio. Impacta que, ante una tragedia de tal calado, logre realizar un relato de trasfondo esperanzador. Ante tantas tragedias que hemos sufrido en pleno siglo XXI, se agradece esta visión positiva de mirar hacia adelante. El director logra una gran historia en la que el espectador advierte que se está hablando de algo más que de un monumento histórico en llamas: aunque sepamos el final, el trasfondo humanista y trascendente del film es capaz de provocar momentos realmente emotivos.
Annaud declaraba que no hubiera realizado Arde Notre-Dame si hubiese habido muertos, si la catedral se hubiese destruido del todo o si los tesoros no se hubiesen salvado. Hacía falta un final positivo. “Antes del incendio no había dinero para reformar la catedral; ahora vamos a reconstruirla mejor”, afirma en una de sus declaraciones, en las que también comparte su visión del cine: “No quiero ir al cine para salir más infeliz de lo que entré, no quiero hacer películas sin esperanza. Ha sido una constante en mi vida. El cine debe permitirnos la evasión, pero también hacernos más felices y mejorarnos”.
La trama, narrada minuciosamente y con un gran realismo, sigue un orden cronológico. Prescinde de cualquier ficción para centrarse en los hechos reales. Así, los 20 primeros minutos recrean magníficamente una jornada corriente en Notre-Dame. Comienza por el primer día de trabajo de un guardia de seguridad en la habitación de paneles que alertan de cualquier incidencia. Ríos de turistas visitan la catedral acompañados por guías que, en sus relatos, van mostrando los múltiples tesoros que alberga la catedral, mientras que un grupo nutrido de fieles asiste a la Santa Misa.
El rodaje recuerda al cine de catástrofes, porque Annaud no duda en recrear el incendio de forma detallada contando lo sucedido: las primeras chispas (¿una colilla mal apagada? No se habla de culpables. Se agradece), las luces de seguridad que saltan, una impresión inicial de falsa alarma hasta que el incendio comienza a crecer con enorme intensidad y… no hay lugar para efectos digitales, todas las llamas son reales. La fidelidad a muchas cosas que se conocen sobre el incendio capta de modo casi increíble la atención de los espectadores.
El cineasta francés opta por rendir tributo a los héroes anónimos que evitaron que Notre-Dame terminase consumida por las llamas, relatando la arriesgada acción de los hombres que lograron extinguirlas y evitar que la tragedia fuera total; también busca dar el protagonismo adecuado a cada uno de los que estuvieron implicados en salvar la catedral. Ha cumplido su deseo.
Annaud centra la película en un pelotón de bomberos que, dejando claro que su código de honor es arriesgar la vida por la de otras personas pero nunca por los edificios, se ofrecieron como voluntarios para sofocar el fuego desde dentro, asumiendo los extraordinarios peligros que suponía esta decisión: accesos complicados, escaleras estrechas, puertas sin llaves, altísimas temperaturas, plomo derretido, derrumbamientos, cenizas, humo… También el heroísmo y protagonismo de varios bomberos novatos.
Realmente fue una misión contrarreloj, que es de donde surge el heroísmo de todos estos trabajadores anónimos. El tramo final apunta con justicia al valor de estos hombres, que se juegan la vida por algo más que por unas históricas piedras.
Un acierto de la película es haber contado con actores no muy conocidos -que lo “bordan”- para conseguir que el espectador logre fijar la atención, no en los actores, sino en los hechos que se suceden y en los sentimientos de sus protagonistas.
Se viven momentos de gran intensidad muy bien reproducidos como la carrera para llegar a Notre-Dame desde Versalles de Laurent de Pardes, regidor de la catedral; la pena de los turistas y de los habitantes de París; la incredulidad reflejada en los noticiarios; el desconcierto de un bombero al que bendice un sacerdote que se ha jugado la vida para rescatar los hostias consagradas, o el respetuoso y emotivo doble salvamento de la preciosa reliquia de la corona de espinas de Jesús que, momentos antes, había suplicado entre lágrimas un anciano sacerdote.
Gran acierto también la escena en la que un bombero joven se ofrece voluntario para apagar el fuego de la zona que sujeta una inmensa campana, cuya caída podría haber provocado el desastre final. Con su manguera apunta emocionado a la campana salvada y se produce una melodía por el contacto del agua con un suave sonido de la campana. En ese momento percibe a sus espaldas, las voces de cientos de fieles rezando y cantando por la noche, pidiendo a la Virgen, con el Ave María, el milagro de que salve la catedral. Creo que todos recordamos con agradecimiento y emoción esa memorable escena.
Jean-Marie Dreujou dota a la película de una fotografía espectacular. Junto a esto, los movimientos de la cámara trasladan al espectador a todos los rincones del incendio en los que pueden tener los mismos sentimientos que invadieron a los protagonistas de la película.
Ficha técnica

- Título Original: Notre-Dame brûle
- Dirección: Jean-Jacques Annaud
- Guión: Jean-Jacques Annaud, Thomas Bidegain
- País: Francia
- Año: 2022
- Duración: 110 min.
- Género: Drama, basado en hechos reales
- Interpretación: Élodie Navarre, Chloé Jouannet, Jesuthasan Antonythasan, Kevin Garnichat, Samuel Labarthe
- Productora: Pathé, TF1 Films Production, TF1, TMC
- Música: Simon Franglen
- Fotografía: Jean-Marie Dreujou
- Estreno en España: 22 de abril 2022