La singular vida de Ibelin | Las maravillas que la vida esconde

José Martín Goenaga

Cinéfilo por afición, me gusta seguir de cerca la actualidad cinematográfica para comprender mejor a la sociedad actual y valorar la idea que esta transmite sobre la persona humana y sus circunstancias.

La singular vida de Ibelin es el documental sobre la vida del gamer noruego Mats Steen, que estuvo en una silla de ruedas desde muy joven a causa de una enfermedad degenerativa que finalmente le llevaría a fallecer a los 25 años de edad. Pero lo sorprendente no es su vida vista desde el exterior, que también, sino su otra vida como jugador de World of Warcraft (con el pseudónimo de Ibelin), un conocido juego de ordenador online.

El documental cuenta cómo Mats, debido a su enfermedad, comenzó a aislarse del mundo real y a refugiarse en un juego de ordenador. Tenía poco trato con amigos o familia en su día a día, pues el tiempo lo dedicaba casi completamente a jugar online. Así empieza la narración del documental, pero no acaba ahí, pues antes de fallecer, Mats deja su contraseña para que sus padres puedan investigar lo que hacía en el ordenador. Y es de esta manera como descubren que su hijo tenía una vida paralela en ese mundo tecnológico pues al publicar un post en el blog que él tenía anunciando su muerte, les comienzan a llegar muchísimos mensajes de amigos que Mats tenía a través de su identidad online. Mensajes extensos y llenos de agradecimiento y de pena por el reciente suceso.

De esta manera, a lo largo del documental, se van narrando las distintas relaciones de amistad que Mats tenía a través de su identidad en el juego de ordenador. Cómo cambió las vidas de algunas de esas personas con sus consejos, y cómo incluso se llego a enamorar de otra persona en ese ámbito. Lo increíble es que todo este relato se cuenta mezclando imágenes reales del juego con las conversaciones que tuvieron entre ellos. Esto es uno de los temas que más impresionan del documental ya que consiguieron hacerse con cada una de las conversaciones que se mantuvieron en el juego y recrearlas con los mismos personajes. Después se realizó un impresionante trabajo de animación y así se consiguió que el espectador pueda vivir de primera mano los mismos sucesos que Mats vivió dentro del juego.

Obviamente, como no puede ser de otra manera, Mats sufrió a causa de sus limitaciones y esto le costó alguno que otro malentendido con compañeros en el juego, pues él no quería desvelar su actual estado físico para que no le tratasen distinto por esa razón. Al final, decidió sobreponerse y comentarlo; momento en el que también empezó a explicar y a contar sus vivencias a través de un blog.

Finalmente, a su funeral acudieron todo su círculo más íntimo de amigos que se había conocido a través de World of Warcraft y así termina el film, dejándonos un muy buen sabor de boca y llenándonos de esperanza ante las dificultades con las que nos podemos enfrentar en la vida.