Nuestro Seúl por descubrir (capítulos 1 y 2) | Una serie por entregas que promete

José Martín Goenaga

Cinéfilo por afición, me gusta seguir de cerca la actualidad cinematográfica para comprender mejor a la sociedad actual y valorar la idea que esta transmite sobre la persona humana y sus circunstancias.

El viernes 24 de mayo se estrenó el primer capítulo de la nueva serie surcoreana «Nuestro Seúl por descubrir«. Cuando nos enfrentamos a propuestas de este país sabemos de antemano que utilizan una narrativa visual y de guión muy distinta a las producciones occidentales a las que igual estamos más acostumbrados. El tipo de bromas son distintas, las escenas dramáticas también, y la utilización de la música junto a primeros planos es frecuente, al igual que los recuerdos en el tiempo. Una vez aceptado esto, y algo de maquillaje extra en los protagonistas masculinos y femeninos, estaremos ya preparados para disfrutar de lo que pueda llegar – siempre que la historia esté a la altura de nuestras expectativas.

Pues bien, «Nuestro Seúl por descubrir», por ahora, las está cumpliendo bastante bien. Y digo «por ahora» porque esta es de esas series que se ofrecen al espectador por capítulos semanales (en este caso, 2 capítulos cada fin de semana hasta terminar el mes de junio). Pero me parece que esta manera de «dispensar» los episodios es, en este tipo de series, la adecuada, pues la duración de cada entrega sobrepasa la hora en 20 minutos. Así, cada capítulo es como ver una película de corta duración, y tampoco pretendemos empacharnos demasiado rápido en el momento de elegir una serie que ver.

Y ¿por qué me parece que esta, en concreto, va apuntando maneras? Porque es capaz de contagiar de humanidad al espectador muy rápidamente, porque parece estar llena de buenos valores que hacen mejor a aquellos que la ven, y porque combina bien la banda sonora y la parte visual con las emociones que pretende transmitir. La serie toca el ámbito familiar, la bondad y la reconciliación entre hermanos, la ayuda mutua, el cuidado de nuestros mayores, el diálogo, la comprensión, etc. Es decir, contiene muchos de los ingredientes que la pueden llevar a ser recomendable. Aún así, habrá que ir viendo (nunca mejor dicho) cómo evoluciona y si sigue siendo fiel a esta primera impresión que ha logrado dejar.

Por ahora, ahí queda el aviso de que quizá Netflix nos ha traído otra serie surcoreana de esas que levantan el espíritu, el ánimo y la moral. Esperemos que así sea.