The Batman

Javier Muñoz Morales

Soy Licenciado en Administración y Dirección de Empresas, así que se supone que lo mío son los números. En realidad, prefiero los libros y el cine. Estoy convencido de que detrás de cualquier película hay una visión del hombre y del mundo que merece la pena descubrir

* Crítica realizada en colaboración con La Vaguada Cines

El universo DC regresa con fuerza a la gran pantalla y nos presenta su nueva versión de Batman, uno de los personajes de cómic más icónicos y representados en la historia del cine. La apuesta era francamente arriesgada porque, en la retina de muchos espectadores, todavía se mantiene fresco el grato recuerdo de la trilogía anterior dirigida por Christopher Nolan. Así que la pregunta es obligada, ¿consigue este nuevo The Batman estar, al menos, a la altura del Batman de Nolan?

La realidad es que, a priori, el listón estaba muy alto y, seguramente para muchos, que Robert Pattinson –el vampiro de la exitosa saga Crepúsculo– diera vida a Batman no resultaba muy alentador sobre el papel. Pero hay que reconocer que Matt Reeves, el director de esta nueva entrega, ha conseguido presentarnos un héroe con identidad propia pero, a la vez, fiel a todos los elementos que contribuyen a crear un personaje reconocible para todos los fans del cómic. Y, lo que es más importante, no necesita compararse con ningún otro Batman anterior.

Robert Pattinson, mucho más convincente como Batman que como Bruce Wayne, está rodeado de actores secundarios de auténtico lujo que contribuyen a apuntalar la trama de la película. El mafioso Carmine Falcone (John Turturro), Catwoman (Zoë Kravitz), y especialmente el Pingüino (con un irreconocible Colin Farrell) y Enigma (Paul Dano) están francamente bien en sus papeles y ayudan a crear la tensión necesaria en la película.

The Batman de Matt Reeves presenta un perfil más detectivesco, desentrañando las pistas que va dejando Enigma a lo largo de toda la película, por lo que más que una película de acción, que la tiene y mucha, parece un thriller por momentos.

Además, la ambientación de la ciudad de Gotham, sucia y oscura, junto con el dominio de la noche durante casi toda la película, los toques góticos de algunos edificios, el uso de las sombras en contraste con colores fuertes como el naranja o el rojo en varios momentos y, sobre todo, la extraordinaria banda sonora, contribuyen a un producto final muy redondo.

La película también es interesante en la reflexión que plantea, aunque no profundice demasiado en ella. Batman es un héroe atormentado, marcado de por vida por una enorme tragedia. Busca la justicia, pero al estilo del “ojo por ojo”. El héroe murciélago es violencia, oscuridad y venganza, pero mantiene la lucidez suficiente para darse cuenta de que la venganza no lleva a ninguna parte, y que es la esperanza a lo que hay que agarrarse para cambiar verdaderamente Gotham.

The Batman es una buena película, muy entretenida, con ritmo y que atrapa por momentos al espectador; y esto tiene mucho mérito para una cinta que dura casi 3 horas. Es un buen comienzo para lo que será, se supone, una nueva trilogía del héroe murciélago, a poco que la recaudación en taquillas acompañe… y seguro que lo hará. En definitiva, los fans de Batman van a salir encantados de las salas de cine.