Sinopsis
La película, un drama de madurez ambientado en los tumultos de la Irlanda del Norte de finales de los años 60, sigue al joven Buddy mientras navega por un paisaje de lucha obrera, cambios culturales radicales y violencia sectaria. Buddy sueña con un futuro glamuroso que lo aleje de los problemas, pero, mientras tanto, encuentra consuelo en su carismático padre y su madre, y en sus alegres abuelos.
Crítica
Belfast
Belfast supone el regreso de Kennet Branagh por la puerta grande. Se trata de una historia tan íntima como personal, en la que está presente la vigorizante dirección del genial cineasta. Escrita por él mismo, la obra regala una filmación atractiva y tierna que toca las fibras del corazón y que se guía más por el amor a la familia y al barrio donde vivió, que por la violencia externa que amenaza con destruir todo.
Brannagh logra algo mágico: un retrato conmovedor de su infancia y su familia, que atrapa al espectador de modo emocionante. Las amables memorias de su infancia son una inesperada expresión del cineasta, que nació en la capital de Irlanda del norte y dejó la ciudad para trasladarse a Reino Unido con su familia cuando tenía nueve años.
Belfast es ingeniosa, tierna, grandiosa y llena de detalles cinéfilos que acarician a través de fogonazos emocionales. Brannagh vierte sin ira sus propios recuerdos, como homenaje al lugar donde vivió antes de escapar de The Troubles, el conflicto que, iniciado 1968, supuso décadas de violencia en la capital irlandesa.
La historia guarda innegables paralelismos con la infancia del genial cineasta y traza un conmovedor, luminoso y descorazonador relato con tintes biográficos,de los tumultuosos años 60 en la capital de Irlanda del norte. La historia se junta a recuerdos de alegrías, sueños, esperanzas e ilusiones entre los que resaltan de modo admirable los lazos familiares y la confianza intergeneracional.
Cuenta la historia bajo la mirada un niño de nueve años, Buddy (Jude Hill). Vive con su madre y su hermano mayor en un barrio obrero de Belfast, cerca de la casa de sus abuelos paternos. Lleno de vida, goza con la diversión de las calles de una comunidad en la que protestantes y católicos viven unidos hasta que la violencia de radicales protestantes contra sus vecinos católicos estalla en las calles.
La película transcurre casi entera en un par de calles y un par de casas de ese callejón -toda la recreación del barrio refleja autenticidad-, con algunos saltos a una sala de cine y a un aula de un colegio. El director es capaz de llenar de universalidad estos rincones al plantear temas de calado existencial, temas que importan: la familia, la fe, el trabajo, la amistad, el primer amor, el desgarro de la muerte o la separación de los seres queridos.
El reparto es perfecto. La interpretación de cada uno de los actores -casi todos ellos irlandeses- es genial, lo que no sorprende si se tiene en cuenta la calidad de la carrera interpretativa del director.
Más allá de las impresionantes actuaciones, Brannagh entreteje detalles de la vida de Buddy, sobre el que recae todo el peso del relato. El espectador se siente impulsado a empatizar inmediatamente con un niño alegre, de ojos brillantes, que ve el mundo con todo su asombro, confusión, miedo y emoción.
Es ingenuo, cariñoso, juguetón. Preocupado por sus padres, que sufren serios problemas económicos. Pendiente de su abuelo enfermo, con el que mantiene diálogos divertidos y profundos. Con sorprendente sencillez y naturalidad es capaz de trasmitir su alegría, sus temores y miedos, su curiosidad ante las conversaciones de los adultos -conversaciones que no entiende del todo- que capta desde su alma inquieta y que, como cualquier niño, escucha furiosamente.
La cámara capta unos maravillosos planos que hacen partícipe al espectador de los sentimientos que brotan de su alma infantil. La inocencia de sus nueve años es asaltada por la creciente violencia de bandas de alborotadores protestantes. Mientras trata de entender la intolerancia religiosa y su nuevo vecindario militarizado, sigue siendo el niño que es, con sus amigos, sus juegos, sus travesuras infantiles, su descubrimiento del cine y su amor por la chica más guapa y lista de la clase. Es un niño que se siente feliz, amado y seguro porque todos sus familiares viven en la misma calle donde es imposible perderse.
Los padres, inspirados en los padres del propio Branagh, forman una magnífica pareja. La madre (Catriona Balfe) es una moderna y elegante; con carácter y con un señorío poco habitual en gentes más sencillas y con pocas oportunidades. Aporta una poderosa y emocional presencia en la pantalla. Es una esposa sufrida que lucha por educar a sus hijos y mantener unida a la familia.
El padre (Jamie Dornan) es enérgico y amable. Aporta una imagen apagada; es un hombre dividido entre la necesidad creciente de mantener segura a su familia y las obligaciones laborales que le exigen trabajar en Londres. No es un padre perfecto (tienen deudas por sus problemas con el juego), pero lucha para mantener segura a su familia.
Ambos son más que capaces de transmitir tanto el amor a la familia -disfrutan con sencilla alegría de la Navidad o con la feria del barrio en la que participan todos, ¡preciosas escenas!-, como la tensión y riñas de un matrimonio bajo un estrés extremo que brota de circunstancias complicadas: educación de los hijos en un ambiente violento, precariedad del trabajo, problemas financieros, necesidad de tener que marchar a un lugar más seguro y, finalmente, la guerra civil en la que de repente se encuentran inmersos. Existen dificultades, pero no hay amargura en la cinta. Se agradece la mirada esperanzada, las dudas que deben resolverse, la prudente toma de decisiones.
El resto del elenco de actores es igualmente extraordinario. Los veteranísimos Judi Dench y Ciarán Hinds, forman una pareja adorable -un regalo para el espectador-, que comparten una relación dulce y amorosa. Son los maravillosos y sabios abuelos de Buddy. El niño encuentra cariño y un refugio en su casa y, a veces, después de la escuela se acerca para pedir consejos a su abuelo, para confesar sus dudas y miedos con diálogos amables, llenos de cariño, confianza y alegría. Conversaciones de hondo calado en las que el abuelo, entre bromas y reacciones sinceras, responde a sus inocentes preguntas.
Con decisiones estéticas certeras, la cámara abre la cinta a todo color presentando el Belfast actual, con una toma de las grúas de Harland y Wolff que dominan el horizonte de la ciudad, para después recorrer las calles y detenerse en edificios antiguos gloriosos y las nuevas incorporaciones a la ciudad, incluido el museo del Titanic. Después, se traslada a una versión en un flamante blanco y negro -que firma el director de fotografía habitual de Branagh, Haris Zambarloukos– del Belfast de 1969.
La filmación estalla en color inundando la pantalla con unas secuencias magníficas, en los momentos en que el protagonista va al cine con su familia para ver One Million Years B.C. y Chitty Chity Bang Bang, o asiste, con su genial abuela, a la representación de Cuento de Navidad.
Breves secuencias, con toques de color por todas partes, que convierten el paisaje gris de Belfast en una nueva realidad.
La cinta cuenta con la participación de otro ciudadano ilustre de Irlanda, el cantante Van Morrison, que proporciona nueve canciones a la acertada y envolvente banda sonora, con ocho temas clásicos del cantautor y uno especialmente compuesto para esta ocasión, entregada instrumentalmente con sonidos de jazz.
En una impactante y emotiva escena final, la cámara proyecta un primer plano del rostro de la abuela. En sus ojos se refleja la tristeza serena de la despedida que, con la mirada quizás un poco perdida, se dirigen a Buddy que ya, sentado en el tren que le llevara a su destino, mira también a su abuela con una ingenua mirada llena de melancolía: no importa lo lejos que te vayas, nunca olvidarás de donde vienes.
Ficha técnica

- Título Original: Belfast
- Dirección: Kenneth Branagh
- Guión: Kenneth Branagh
- País: Reino Unido
- Año: 2021
- Duración: 98 min.
- Género: Drama
- Interpretación: Jude Hill, Caitriona Balfe, Ciarán Hinds, Jamie Dornan, Judi Dench, Lara McDonnell, Aoife Hinds, Gerard Horan, Turlough Convery, Sid Sagar, Conor MacNeill, Gerard McCarthy, Brid Brennan, Lewis McAskie
- Productora: TKBC. Distribuidora: Focus Features
- Música: Van Morrison
- Fotografía: Haris Zambarloukos
- Estreno en España: 28 de enero
Magnífica crítica !
Te pasea por la película y abre las ganas de verla.
Aún no he ido pero no me la pierdo.
Gloria