Sinopsis
La disfuncional familia Roy, dueña del mayor conglomerado de empresas de comunicación y entretenimiento del mundo, sigue la constante de las dos primeras temporadas: Guerra contra la competencia, cruzada personal de Kendall hacia su padre y, en esta nueva entrega, el enfrentamiento legal con la Fiscalía por graves delitos cometidos hace dos décadas.
Crítica
Que Succession es excepcional no es ya ningún secreto. Está dentro del TOP series de ficción de los últimos años, siendo sin duda de las mejores del siglo XXI, e incluso entraría en una lista de las 100 más brillantes de la historia. El relato es potentísimo, se mueve con exquisitez en los diálogos y la interpretación resulta fascinante (de 10 el trabajo de Cox y Strong, y sobresaliente Snook, Culkin, Braun y Macfadyen).
Al tratarse de un drama familiar, al margen de que el argumento siempre discurra en la disputa sucesoria del monopolio periodístico, cada capítulo es una impresionante demostración tanto de las virtudes interpretativas del elenco como del desarrollo de la historia y las subtramas. Estas son de por sí muy atractivas y salvajes para el espectador, ofrecen mucho morbo para seguir enganchado, pero son elevadas hasta la sublimidad gracias al ritmo trepidante de las escenas, compuestas al 100% por la frialdad, tensión cortante y oscuridad de las conversaciones, la intencionada brusquedad de los movimientos de cámara a modo falso documental y la inquietante música de fondo. Todo contribuye a que Succession finalmente produzca tanto placer y a la vez tenga tanta clase, incluso acogiendo el obsceno lenguaje empleado por los protagonistas y la suciedad de las interrelaciones, sólo apaciguadas cuando hay convergencia de intereses.
La narración es majestuosa. Goza de una solidez impresionante. Todos los elementos informativos están perfectamente hilados. No parece tener fisuras. Y lo que es más importante, el guion, altamente sorpresivo y con grandes giros, se adapta enteramente. A este objetivo ayuda que toda la potencia de la historia resida en los personajes. El poder y el dinero mueven el mundo, esta es la premisa que un soberbio Cox y después el resto llevan de la realidad a la ficción de sus papeles. La presentación es muy dura, tanto como pedagógica. El modus operandi de Logan Roy e hijos conforme a su ambición sin precedentes, un ecosistema donde no hay cabida para el amor o la debilidad, tiene unas consecuencias absolutas sobre sus vidas. La corrupción es la moneda de cambio, una ecuación en la que no puede entrar la inocencia. De esto va Succession, de saber qué ingrediente da sabor a la vida de esta multimillonaria familia y qué modela sus relaciones fraternales. ¿Afecto o juegos de poder? A esos niveles de elitismo empresarial, ¿existe la paz del alma? La serie hace un extraordinario ejercicio de transcripción de lo que sucede en la realidad a lo que refleja en la serie ficcionada. El punto negativo, aunque ayuda a comprender la enormidad de la perversión de ese mundillo, está en la excesiva explicitud de lo más repulsivo y viciado de los personajes, no solo una grosera forma de hablar que hace daño, sino en los actos, sobre todo de corte sexual, tan evidentes.
Ficha técnica
- Título Original: Succession
- Dirección: Jesse Armstrong
- Guión: Jesse Armstrong
- País: Estados Unidos
- Año: 2021
- Duración: 60 min.
- Género: Drama, familia, empresa
- Interpretación: Brian Cox, Jeremy Strong, Sarah Snook, Kieran Culkin, Hiam Abbass, Alan Ruck, Nicholas Braun, Matthew Macfadyen, Peter Friedman, Katie Lee Hill, Peggy J. Scott, Christine Spang, James Cromwell
- Productora: Gary Sanchez Productions. Distribuidora: HBO
- Música: Nicholas Britell
- Fotografía: Andrij Parekh, Patrick Capone, Chris Norr
- Estreno en España: 2021