Estrenada en el año 2000, Billy Elliot (Quiero bailar) es una película dirigida por Stephen Daldry. Entre sus éxitos, figura este dramático film que muestra el espíritu de superación de un chico de 11 años llamado Billy Elliot. El de Dorset (Inglaterra) ha dirigido otras grandes cintas como Las horas o The Reader entre otras. Además, fue nominado a los Premios Emmy como mejor dirección por la serie The Crown.
Billy Elliot (Quiero bailar) narra la historia de un enfrentamiento entre mineros y la policía en Durham (Londres) en 1984. La cinta va dirigida a todo tipo de público, ya que no tiene escenas de peligro. En todo el film, hay pocas escenas de violencia, aunque cuenta con escenas de egoísmo y prepotencia por parte de Jackie Elliot, un padre con mal carácter. A lo largo del film, se siente más liberado, debido a los éxitos de su hijo con el ballet. El guion de esta película está bien planificado en líneas generales. La idea central es sencilla de entender, a causa de que las escenas están bien realizadas y no cuentan con saltos en el tiempo.
En el ámbito musical, la película cuenta con muy buena banda sonora, especialmente cuando Billy está bailando en su casa sin que sus padres le vean en su habitación. De hecho, la música eleva la emoción del film y le pone ganas de verla. Stephen Warbeck acierta con esta música llena de alegría. El guion está muy bien estructurado y elaborado, de principio a fin de la cinta. Lee Hall, el guionista, interpreta a la perfección cómo tiene que ser la película y lo lleva a la práctica de forma notable.
En el aspecto de los personajes, Billy es un tipo normal que le encanta el ballet y demuestra a su familia que lo mejor para él es dedicarse al mundo del baile. La interpretación de Billy es magnífica. Sus escenas muestran el esfuerzo que realiza para que Jackie y Tony Elliot entren en razón. Lo mejor para su futuro es el ballet. No obstante, el egoísmo se apodera de ellos. Las únicas personas que lo apoyan desde el principio son la profesora Wilkinson, la abuela de Billy y su mejor amigo, Michael Caffrey. Tienen confianza en él y lo ayudan en todos los aspectos, incluso en su nuevo proyecto.
En la huelga de mineros, Billy se pierde una importante prueba de ballet en Newcastle, a causa de la detención de Tony, el hermano de Billy, por parte de la autoridad. Jacky y Tony no quieren que Billy se dedique al ballet, ya que piensan que es una actividad solamente para chicas. Tanto Jacky como Tony muestran en otra ocasión su egoísmo y prepotencia.
Durante la prueba en el Royal Ballet, Billy muestra su peor versión agrediendo a un aspirante y se siente arrepentido de los hechos. El riesgo de ser expulsado para siempre de su pasión favorita está expuesta, pero la brillante actuación de Billy delante del jurado propicia que lo perdonen y lo admitan en una de las prestigiosas academias de ballet del mundo.
Tras su admisión, su padre Jackie y su hermano Tony se emocionan al ver a su hijo Billy con un brillante futuro en el Royal Ballet. Le ayudan a crecer tanto en el aspecto personal como profesional. Están dispuestos a abandonar la huelga y volver a trabajar con la misión de pagarle los estudios a Billy.
En definitiva, Billy Elliot supera todas las expectativas. La capacidad de no rendirse cada día que pasa es el elemento esencial de la película. Tanto Jackie como Tony se sienten orgullosos de Billy Elliot. Lo mejor del film, es la capacidad de superación de Billy en el ballet y en las situaciones familiares. Por el contrario, lo peor es el conflicto familiar que propicia que no lo dejan hacer lo que más le apasiona: el ballet.